MUESTRA DOCUMENTAL:
UN RECORRIDO POR VARIOS SIGLOS DE HISTORIA
Periodo de la administración española (1722-1898)
Puerto Rico comparte su patrimonio documental con España, ya que gran parte de los documentos de la época temprana de la conquista y colonización (siglos XVI y XVII) se encuentran en los archivos españoles. En Puerto Rico, los documentos existentes de este periodo datan a partir del siglo XVIII. Entrelos fondos documentales más destacados en el archivo se encuentran: Capitanía General de Puerto Rico, la Real Hacienda, la Real Audiencia, Obras Públicas, los documentos municipales y los protocolos notariales. Algunas de estas dependencias del gobierno peninsular cesaron de operar a partir del Tratado de París, firmado por Estados Unidos y España al concluir la Guerra Hispanoamericana.
El documento de Puerto Rico más antiguo bajo nuestro cuidado son las Actas del Cabildo de San Juan Bautista de Puerto Rico, 1722-1730. En estas se registran decisiones administrativas, el orden público, la defensa militar de la ciudad, la administración de justicia, la recaudación de impuestos, el mantenimiento de caminos y edificios públicos, el abastecimiento de alimentos y agua, así como otros aspectos de la vida cotidiana, social y económica durante esos años.
En este periodo también podemos encontrar la Relacion veridica en que se da noticiado de lo acaecido en la Ysla de Puerto Rico a fines del año 46 y principios de el 47…, perteneciente a la colección Robert L. Junghanns, en el que puedes transportarte al Puerto Rico de mediados del siglo XVIII.
El Regimiento de Milicias Disciplinadas de Caballería tenía como fin proteger la isla de ataques de otras potencias europeas. Este informe presenta su estado siete años después de un evento clave en nuestra historia: la última invasión británica de 1797. En aquella victoria sobre los ingleses, se reconoce el surgimiento de una identidad criolla, con un fuerte sentido de pertenencia como motor principal de su aguerrida defensa.
La Real Cédula de Gracias de 1815, emitida por el rey Fernando VII, fue una medida para revitalizar la economía de Puerto Rico y reforzar la lealtad a la Corona. La misma incentivó la inmigración de europeos católicos, otorgándoles tierras gratuitas y exenciones fiscales por diez años. Además, flexibilizó el comercio con España y otras colonias, reduciendo aranceles y fomentando la importación para trabajos en la producción agrícola. Esta política atrajo a numerosos inmigrantes e impulsó el desarrollo de la agricultura y economía de la isla en el siglo XIX.
En plena época de la Ilustración Científica, viajaron a Puerto Rico figuras como el artista y naturalista francés Auguste Plée, quedando registrada su visita en los pasaportes conferidos. Durante su breve estadía en Puerto Rico (entre 1821 y 1823), realizó 58 dibujos a lápiz de los pueblos de la isla que visitó bajo encomienda del Museo de Historia Natural de París.
Los documentos también registran acontecimientos que nos permiten reflexionar. Una muestra de estos son los archivos relacionados a personas esclavizadas. Entre tantos, resaltan los registros remanentes del fondo Gobernadores Españoles que documentan los procesos del trato a personas negras emancipadas.
Según los datos, el Majesty, último barco esclavista que llegó a Puerto Rico arribó a Humacao en 1859, cuando ya la trata esclavista era ilegal en Puerto Rico. En el acervo podemos encontrar las listas de personas que habían obtenido su libertad, pero que siguieron siendo expuestas a condiciones esclavistas. Uno de estos casos es el de Mianga, un niño consignado a don Francisco Cortón, quien llevaba una placa que lo identificada con el número 350, igual que una persona esclavizada, y muere a dos meses de haber llegado a Puerto Rico.
El registro fotográfico más antiguo en nuestro acervo también es de este periodo y pertenece a la familia Roig de Humacao. Este presenta un retrato del niño Antonio Roig Torrellas cercano al año de 1860 en un ambrotipo, una placa de vidrio negativa subexpuesta que al estar cubierta por la parte posterior con pintura oscura da la impresión de ser un positivo.
Otro evento de gran trascendencia en la historia fue el Grito de Lares, ocurrido el 23 de septiembre de 1868. Esta insurrección independentista no pasó desapercibida y dejó una huella profunda en la memoria colectiva del país. Su impacto puede rastrearse a través de diversos fondos documentales, incluyendo aquellos relacionados con municipios fuera del escenario principal de los hechos. Por ejemplo, un informe de la Policía Insular da cuenta de los “sucesos ocurridos en los pueblos de Lares y El Pepino durante los días veintitrés y veinticuatro del corriente [septiembre de 1868]…”. Este informe, conservado entre los documentos del pueblo de Bayamón, evidencia cómo los hechos resonaron más allá de su epicentro, generando reacciones en las diversas estructuras del gobierno colonial.
Cerramos este primer periodo histórico con imágenes del derribo parcial de las murallas de San Juan entre 1896 y 1898, tres años políticamente trascendentales para Puerto Rico: el último año del dominioel breve periodo de autonomía concedida por España en 1897 y la invasión estadounidense en 1898.
Las murallas, construidas para proteger la ciudad, comenzaron a verse como un obstáculo para el crecimiento urbano y la modernización. El Ayuntamiento de San Juan obtuvo permiso de la Corona española para demoler parte de las murallas, principalmente para abrir nuevas vías de acceso y facilitar el desarrollo económico y urbano. Uno de los tramos derribados fue cerca de Puerta de Tierra. Hoy, los tramos sobrevivientes de las murallas forman parte del Sitio Histórico Nacional de San Juan, protegido y valorado por su importancia patrimonial.











